Andaba un día pelotudeando por la World Wide Web y me encontré con el blog de un dizque joven escritor marginal argentino con el curioso seudónimo de Roni Bandini, a pesar de mi alergia al nombre "Ronald" (Reagan de por medio), el apellido "Bandini" (el mismo apellido del alter ego del sí, super sí, escritor marginal estadounidense John Fante, cuyo personaje central se llama "Arturo Bandini"), decía, el apellido Bandini hizo que circulara las páginas del blog del tal Roni (¡qué diminutivo chetísimo llegando al garca!).Bué, resulta que Roni (ya no lo nombraré por su apellido seguramente falso) escribía y era según sus propios ojos el "Bukowski argentino" (ponerse "Roni Chinaski" tal vez le pareció muy obvio, y buscó el personaje de Fante sabiendo que es, era, uno de los nombres recurrentes que saltaba cuando el viejo Buk nombraba algún predecesor que sentía muy cerca suyo) ... (¡Mierda! o ¡Shit! Esto está lleno de paréntesis). La cuestión es que el tipo aparte nombraba mucho a un tal Hunter S. Thompson, quien luego supe era el autor de un libro con cierta fama de under y de "romper todas las reglas", tal libro es "Miedo y asco en Las Vegas", los datos fueron dichos ya no los aburro mucho más, solo para decir que me puse a la búsqueda de las obras de este, otro más, Thompson.
Vemos ahí la tapa del libro "Mescalito" de Hunter S. Thompson, cuya solapa lo promociona como "el libro que los lectores de Thompson han esperado por más de diez años ... Y no se sentirán defraudados". ¿Será que yo no soy (o no era) un lector de Thompson por eso sí me sentí defraudado?. El libro está compuesto por una introducción (con todo respeto) y tres relatos, y ni en pedo se acerca a Bukowski o a Fante, es una opinión.
Respecto al "joven escritor marginal argentino", no es joven, ni marginal, es "escribidor" y tal vez ya no sea argentino, ya que divide su tiempo entre La Gusanera (a.k.a. Miami), la Tiling-City (a.k.a. Punta del Este) y el asiento delantero de su Toyota coupé japonés.
Igual ahí fue, tenia que estar en esta bitácora que me he inventado, y después de todo he leído cosas peores.